Llevar una vida sana, hacer deporte y cuidar la alimentación es un hábito que también se aprende en la escuela. Así nos lo explican desde el colegio Bética-Mudarra de Córdoba, donde enseñan a sus alumnos a ser responsables de los alimentos que comen y de la importancia del ejercicio físico para la salud tanto en su vida actual como futura.

Pregunta. Normalmente el comedor se asocia al tiempo libre o a la hora del recreo pero ¿es también un espacio para educar al alumno/a?

Respuesta. Efectivamente, en el centro entendemos el comedor escolar como un espacio educativo, un lugar donde desarrollar relaciones de amistad y compañerismo entre el alumnado y donde fomentar hábitos saludables de alimentación. Nuestra premisa es ofrecer a nuestros alumnos elaboraciones caseras y platos tradicionales que satisfagan y se adapten a los gustos de los comensales.

P. ¿Tenéis instalaciones propias?

R. Sí el colegio dispone de cocina propia y un espacio de uso exclusivo para comedor escolar. Nuestro colegio posee cocina propia y las instalaciones necesarias para la elaboración diaria de la comida. Los menús son elaborados por un nutricionista que garantiza todo el aporte nutricional necesario para niñas y niños en edad escolar y la adquisición de hábitos alimentarios saludables y equilibrados. En el caso de alumnos con alergias o intolerancias, debidamente acreditados, se les servirá un menú adaptado a sus necesidades.

P. ¿La comida se cocina en el propio colegio?

R. Sí, diariamente la cocinera y los ayudantes de cocina elaboran los menús establecidos por el servicio de nutrición de la empresa concesionaria.

P. ¿Cuál es el criterio para elaborar el menú de una forma saludable? ¿Lo hace un nutricionista?

R. La empresa que tenemos contratada tiene un nutricionista que mensualmente elabora los menús. Los manda con antelación para que lo revisemos por si vemos conveniente hacer algún cambio. Es ese caso ellos ven la viabilidad o no de nuestra propuesta.

P. En el colegio os esforzáis por que vuestros alumnos coman de forma sana, pero evidentemente también está la parte de la alimentación en casa, ¿aconsejáis a las familias sobre la dieta que deben seguir sus hijos?

R. No. 

P. Las frutas y las verduras (sobre todo las últimas) no suelen ser del agrado de los niños, ¿cómo les inculcáis que comer estos alimentos es sano y también están ricos?

R. En el menú escolar no deben faltar alimentos necesarios para el desarrollo del niño y para la adquisición de buenos hábitos alimentarios. Intentamos potenciar los platos de verduras y las ensaladas como plato principal o como guarnición pero como somos conscientes de los gustos del alumnado servimos pequeñas cantidades para que vayan probando todo. También disponemos de cartelería para que visualicen lo que profesores y monitores intentan inculcarles.

P. La comida saludable va unida también a la actividad física, ¿qué importancia tiene el deporte en vuestro cole?

R. Mucha. Aparte de las clases de Educación Física, que forman parte del currículo obligatorio desde toda la etapa de Primaria hasta el primer curso de Bachillerato, todos los alumnos que lo deseen pueden prolongar en horario extraescolar su permanencia en el centro y su formación integral aprovechando la oferta de actividades físicas y deportivas de nuestro centro.

P. ¿Qué valores se fomentan a través de las clases de educación física y las actividades extraescolares?

R. Entendemos como prioritarios e imprescindibles para la buena formación de nuestros alumnos valores personales como el trabajo, esfuerzo, coraje, espíritu de superación… Otros pueden englobarse en una esfera colectiva como el compañerismo, el compromiso, la solidaridad, la empatía (saber ganar y perder)...

P. ¿Qué deportes se suelen practicar en vuestras instalaciones?

R. Deportes de equipo: fútbol sala, baloncesto, voleibol (los más frecuentes), balonmano, béisbol y, puntualmente o de manera ocasional, rugby y hockey.

Deportes individuales: atletismo, gimnasia acrobática, patinaje, tenis y, puntualmente, otros deportes de raqueta como bádminton, tenis de mesa, pickleball…

P. En este país (y en todos los países desarrollados en realidad) hay un serio problema de obesidad infantil, ¿cuál creéis que es la mejor forma de solucionar este problema desde el ámbito escolar, familiar o ambos?

R. Desde la institución escolar creemos que estaría bien, como se ha implementado en este curso, un aumento de las horas semanales de Educación Física. El problema es que este impulso se ha quedado en apenas una muestra de buenas intenciones porque en realidad sólo se ha incrementado el horario en una hora y solo en 1ºESO. Seamos serios… o lo hacemos o no lo hacemos.

Desde la familia pensamos lo mismo. Habría que buscar espacios de encuentro para actividades físicas y deportivas que pongan en contacto a padres e hijos. Pero pensamos también que estas actividades estaría bien que contarán con la iniciativa y el amparo de los poderes públicos (ayuntamientos, consejerías…) que deben tomar responsabilidades en la promoción de actividades de calidad, supervisadas por personal debidamente cualificado, para sus ciudadanos y no abandonarlos a su suerte dejando que cada cual haga tareas que pueden llegar a ser contraproducentes cuando no incluso peligrosas.

P. ¿Qué papel juega la televisión y la publicidad en particular en el fomento de comida poco saludable?

R. El papel que juegan los medios de comunicación creo que no es demasiado bueno. Prima mucho más el interés comercial que la intención de servicio público. Aquí tendrían que ser de nuevo los poderes públicos quienes deberían tomar cartas en el asunto y, lo mismo que se eliminaron las campañas publicitarias de alcohol y tabaco en eventos deportivos, medios de comunicación… al menos, se podría regular o limitar toda publicidad relativa a comida basura.