La llegada de septiembre marca la vuelta de los estudiantes a las aulas y el inicio de un nuevo curso escolar. Con mochilas llenas de expectativas y la mente abierta a nuevos conocimientos, los estudiantes se preparan para embarcarse en una emocionante aventura educativa.

Este mes simboliza una oportunidad para el crecimiento personal, el desarrollo académico y la construcción de amistades duraderas. Los docentes, por su parte, se esfuerzan en diseñar un entorno de aprendizaje estimulante y enriquecedor, asegurándose de que cada estudiante tenga las herramientas necesarias para alcanzar su máximo potencial. Así, septiembre nos recuerda la importancia de la educación y el continuo viaje hacia el conocimiento.

Pupitres, pizarras, libros…todo está listo para la vuelta de la vida a los colegios. Pero ¿qué hay de los profesores? Ellos también se preparan para la emocionante tarea de impartir nuevas lecciones.

El pasado 1 de septiembre, profesores y profesoras se incorporaron con un entusiasmo desbordante, preparando con meticulosidad, atención y dedicación cada detalle para dar la bienvenida a los alumnos y alumnas. 

Hemos hablado con Luis García, docente del colegio Academia Santa Teresa y hemos podido indagar un poco más y aprender como se preparan los profesores y profesoras para el nuevo curso escolar y cuales son sus inquietudes y emociones:

1) ¿Cómo es esa vuelta al centro después de dos meses?

 La verdad es que las vueltas siempre traen cosas nuevas, nuevos compañeros, nuevas emociones, nuevas asignaturas. Todo lo que se vive los primeros días es una mezcla, una parte de ti quiere alargar un poquito más las vacaciones, pero otra ya quiere empezar con la rutina y a empezar esto que nos gusta tanto, enseñar. 

2)  Estos días antes de que lleguen los niños y niñas ¿qué es lo lleváis a cabo?

En estos días, nos ocupamos de una multitud de tareas. Se hacen las listas de cada grupo según las optativas elegidas, se elaboran horarios, se dedica tiempo a las programaciones, la preparación de la reunión de principio de curso, a proyectos interdisciplinares, decoración de las clases. Además, este año ha entrado en vigor una normativa a acerca de organizar recreos activos e inclusivos, tarea a la que también estamos dedicando tiempo. 

3) ¿Cuáles son las sensaciones y sentimientos?

Los sentimientos estos días son extraños y algo mezclados, pasamos tiempo organizando lo que vamos a hacer en nuestro día a día, y queremos ponerlo en marcha. La preparación de nuevos proyectos y tareas, hay profesores que dan nuevas asignaturas, otros seguimos dando las mismas. Todo esto genera una sensación de nerviosismo. 

Es como los nervios que sentimos antes de un evento importante o al comenzar un emocionante viaje, es esa misma emoción previa al inicio del curso que todos compartimos.

4) ¿Qué expectativas se tiene de este curso?

Cada profesor tiene sus propios objetivos, se escuchan frases como “este año me lo voy a tomar más así”, o “este año quiero cambiar esto del curso pasado”. Yo creo que la pasión por la materia que enseñamos es fundamental para que nuestros alumnos la perciban.  Así que, si tuviera que decir mis expectativas, serían ilusionarme con comenzar, disfrutar de las clases, emocionarme con proyectos nuevos, o con repetir algunos antiguos. Esto es, sin duda, lo más importante para mi. 

Los profesores desempeñan un papel fundamental al inspirar, guiar y nutrir el aprendizaje de sus estudiantes. No solo transfieren conocimientos, sino que también modelan valores, fomentan el pensamiento crítico y ayudan a desarrollar habilidades sociales y emocionales.

Así que, mientras las aulas se llenan de risas, preguntas y descubrimientos, recordemos que detrás de cada lección hay un profesor dedicado, listo para guiar a sus estudiantes en su viaje de aprendizaje. ¡Aquí estamos, listos para un nuevo comienzo!